hay una zapatería,
dónde van las chicas guapas,
a tomarse la medida.
Se levantan la faldita,
se les ve la pantorrilla,
y los chicos de vergüenza,
se han caído de la silla.
Morcilla!
Esta es la canción que ayer intentaba recordar mientras paseaba por la Plaza Redonda, pero la neurona me patinó y esperaba que mi madre se hubiera acordado. A ella le patinó también, y fueron mis sobrinas las que me tuvieron que refrescar la memoria. Eso sí, con las adaptaciones típicas de los nuevos tiempos.
Y os contaba esto, porque en estos momentos tenéis la oportunidad de visitar la Plaza Redonda, antes de que en 8 meses vuelvan a poner la cubierta con todos los tenderetes. Han rehabilitado todas las fincas y ahora le ha tocado el turno a las tiendecitas. En estos momentos es cuando podéis tirar fotos sin los típicos carteles de las obras, y, sobre todo, porque como ahora no hay cubierta ni tiendas, la plaza parece más grande, más luminosa, se ve la fuente, etc. Vamos, que será un momento histórico el que podáis inmortalizar.
Bueno, pues os dejo con unas imágenes del resultado. Yo, me voy a la mascletà!!!
Au, kkuuuus
pues si que ha cambiado sí...está muy bonita ahora, tengo ganas de verla de nuevo con los puestos pero con la cara lavada...
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